SER
PARTE DE LA CANCIÓN
En la voz de Brenda Espinosa sucede naturalmente la canción.
Sin artificios, ni
ornamentos que la obstruyan, la canción se transparenta, y es nueva y fresca
cada vez, como si asistiéramos recién a su alumbramiento y latiera en un
temblor de luz primera.
Dedicada guitarrista, Brenda
ha integrado su voz y su canto al instrumento en esa “conjunción” que es el
cantor solista.
Con esta entrega,
iluminada y encendida por esa Lumbre de
canción que es su propósito, Brenda nos
con-vida, nos participa de su espíritu, lo que en cierto modo es hacernos parte
de la canción. O sea, de un temblor de vida nueva.
Juan Manuel Alfaro
Paraná, 23/octubre/2013